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viernes, 28 de septiembre de 2012

La dichosa felicidad

El estribillo de la canción "La felicidad" de Palito Ortega, que ya tiene más de 40 años, decía lo siguiente, si la conocéis podéis cantarla:

La felicidad, ah, ah, ah, ah, 
de sentir amor, oh, oh, oh, oh, 
hoy hace cantar, ah, ah, ah, ah, 
a mi corazón, oh, oh, oh, oh. 
La felicidad,  ah, ah, ah, ah,  
me la dió tu amor,  oh, oh, oh, oh.  
hoy vuelvo a cantar,  ah, ah, ah, ah,  
gracias al amor, y todo gracias al amor.

Felicidad y amor, ¡qué bonito!

Hoy quiero hablar de la felicidad, otro de estos conceptos inmanejables que se presta a muchas interpretaciones. Quisiera repasar alguna de ellas.

Vamos a ir del presente al pasado para volver al presente.

Para Fredy Kofman la felicidad es uno de los cinco valores últimos, comunes a todas las personas. El amor es otro de ellos. Y le ocurre lo mismo que a la autoestima (ver esta entrada). Cuando está basada en factores externos, como que tu equipo de fútbol gane el partido, no será duradera, se verá zarandeada por la permanente impermanencia del mundo en que vivimos. Cuando está basada en factores internos, en recorrer el camino más que llegar al destino, en la búsqueda más que en logro, será más duradera. Pero nunca tanto como la espiritual.


Es decir, mejor la felicidad duradera que la impermanente, ...,  no se, no se, lo uniforme, sin altibajos, me da que pensar.

Vayamos ahora con los griegos (wiki) para los que todas las acciones humanas se realizan con un fin, que a su vez se supedita a otros, hasta llegar a un fin último que justifica los anteriores. Este fin último es la felicidad y para Aristóteles consiste en la autorrealización de la persona. Todos los hombres están de acuerdo en perseguirla, pero en desacuerdo sobre qué consiste.

Según Aristóteles, lo que se busca debe cumplir varias condiciones: Se debe buscar en si mismo, ser suficiente, que se consiga por la propia actividad y que esta actividad sea continua. Además se debe compartir y vivirla en una comunidad regida por buenas leyes.

Aquí tenemos todos los ingredientes de la autorrealización en la felicidad: actividad propia y continuada, suficiente en si misma y compartida en comunidad, ... ¡definitivamente no hemos inventado nada en 24 siglos!

En el yoga más que de felicidad hablamos de Dicha, que tiene sus matices. No es lo mismo ser feliz que alcanzar la dicha ... supongo. 

Palabras, una vez más solo palabras.

martes, 25 de septiembre de 2012

La biología nos la juega

Hay una frase que me encanta que dice algo así como: todo lo que me gusta es inmoral, ilegal o engorda.

Me hace pensar sobre nuestra "humanidad" o lo que es lo mismo pero al revés, sobre nuestra "animalidad", sobre toda la biología que se oculta detrás de nuestro comportamiento, sobre esos factores hereditario-genético-animales que están presentes en el cerebro límbico.

La criminología en sus comienzos buscaba factores biológicos y genéticos como causantes de los comportamientos criminales. Este enfoque fué evolucionando, desde la genética a la psicología-psiquiatría, luego a la sociología, hasta llegar en la actualidad a una combinación de las anteriores. En el fondo, lo que se pretende es encontrar una relación causa-efecto entre el comportamiento criminal y algún factor "medible" o detectable del individuo.

Respiro tranquilo cuando compruebo, que todos los intentos que ha habido para establecer una relación directa entre la biología, la genética y el comportamiento humano han sido infructuosos. Los factores genéticos son condicionantes pero no determinantes. Hay otros aspectos como el social y la propia experiencia personal que tienen más influencia.

En la naturaleza no se dan comportamientos tales como: cuidar de los discapacitados, enterrar a los muertos, cocinar los alimentos, etc... Este tipo de comportamientos son humanos, son comportamientos sociales. En casos extremos donde estuviera en juego nuestra propia subsistencia, probablemente nos saltaríamos algunos de estos condicionantes y seríamos más "naturales", pero ahí está lo social para evitar las situaciones extremas.


Algo parecido ocurre con la comida, nuestra biología acepta sin problemas todo lo que le echemos dentro. Nuestro cuerpo está preparado para la escasez, no para la abundancia, hace muy buen uso de todo lo que le llega. Así nos encontramos en una tira y afloja entre nuestra naturaleza acumuladora y nuestra humanidad social, que nos invita a evitar el almacenar en exceso, además de a estar guapos.

Lo mismo sucede con el dinero, y gran parte de lo que podemos conseguir con él, nuestra "animalidad" nos invita a acumular, por si acaso, por si llega una situación extrema. Sin embargo nuestra humanidad, nuestro ser social, nos dice que lo tenemos que compartir ¿verdad?. Vivimos en sociedad, ya estamos "desanimalizados", compartir es lo natural ¿para qué acumular si lo social lo hace innecesario?

Los factores genéticos son condicionantes pero no determinantes.




Ring........ Ring...........Ring...........

domingo, 23 de septiembre de 2012

esTado

¿Cual es tu esTado en este momento? Defínelo con una o más palabras ... ¿disponible y lleno de recursos?

¡Pues como todo el mundo! al menos por lo de lleno de recursos.

Retomemos el modelo de mapa-territorio, según el cual, cada individuo construye su propia representación del mundo. La realidad está ahí fuera (territorio), pero para cuando llega a nuestra consciencia ha sido filtrada, de forma que cada cual vemos nuestra personal "realidad customizada" (mapa). El yoga habla de los Kleshas.

Este modelo justifica que dos personas reaccionen de diferente manera ante un mismo hecho, después de todo, no están viendo ni interpretando lo mismo. Ahora se me ocurre el ejemplo de un reallity por la tele, algunas personas se implicarán emocionalmente con lo que están contando, otros se fijarán cómo visten los protagonistas y algún otro se indignará por la bajeza moral de la cosa.

Este modelo tan sencillo pone en nuestras manos la capacidad del cambio. Podemos decidir cambiar de filtros o limpiar los que tenemos para construirnos un nuevo mapa. ¡Uy que miedo! ¡cuanta responsabilidad! ¿Dónde hay que ir?

Si queremos hacerlo nosotros mismos y ser protagonistas, existen varios enfoques. Podemos aprender a resolver situaciones concretas, dotados de herramientas específicas de alta efectividad y también podemos mejorar nuestro esTado y estar preparados para lo que nos venga, sea lo que sea. Ambos enfoques pueden ser efectivos y sin duda también nos aportarán conocimientos sobre nosotros mismos y los demás. Hoy voy a hablaros del segundo de ellos, de lo qué significa mejorar el esTado.

Si estamos contentos veremos la vida color de rosa, incluso el careto del jefe de color rosa. A esto me refiero.


Mejorar el esTado es equivalente a lo que yo llamo crecer verticalmente, hacernos más sabios, más inteligentes espiritualmente, más capaces, más guapos.

Este crecimiento se puede realizar por diferentes recorridos, todos ellos buenos, cada cual debe elegir su propio camino. Puede ser el trabajo-realización, el yoga, la lectura, la meditación, etc...  o lo que es más habitual, una sabia combinación de varios de ellos.

Yo personalmente pienso que el aprendizaje debe ser progresivo y escalonado. Desconfío de los sistemas que prometen grandes resultados en poco tiempo, sencillamente porque pienso que el crecimiento nos va transformando "celularmente" y esto requiere readaptaciones matriciales sinápticas (me lo acabo de inventar). Se pueden conseguir experiencias cumbre de forma puntual, pero no hay cambio "celular". También pienso que hay sistemas más rápidos y adecuados para cada tipo de personalidad. Al final, acabaréis encontrando el vuestro.

Si estáis leyendo este blog, ya habéis dado el primer paso.

miércoles, 19 de septiembre de 2012

Bajando de la torre de marfil

Cuando un idealista baja de su torre de marfil, acaba cayendo en las alcantarillas.

Desconozco el origen de esta frase, pero hoy viene al caso, como advertencia.

No es lo mismo la actividad de la mente que interactuar con el entorno. Y no lo es por varias razones. La primera es lo fácil que nos autoengañamos y autoconvencemos de lo que sea. Una construcción mental requiere mucho menos energía que una real, además la "realidad" es molesta, tiene sus manías y suele ser testaruda. Hemos podido comprar el sofá más bonito de la tienda pero resulta que no cabe en el salón, no entra por la puerta o el color elegido no pega ni con cola con el resto de la habitación.

La segunda razón es que cada uno de nosotros tenemos un mapa diferente para movernos por la vida, lo que a mi me parece bueno no tiene porqué parecérselo a los demás. Por poner un ejemplo, hay personas/situaciones a las que les gusta dirigirse hacia objetivos concretos, funcionan en base a retos y otros sin embargo, se movilizan para alejarse de algo molesto, dirigiéndose hacia no se sabe donde.

Una tercera razón es que cada cual estamos en un diferente punto de partida, nuestro aquí y ahora particular, el lugar y momento en que nos encontramos. No podremos utilizar una buena idea si los "beneficiarios" no estamos preparados para hacerla nuestra y llevarla a cabo. Todo aprendizaje es progresivo, escalonado, las metas se consiguen paso a paso, disfrutando de cada pequeño logro. Un paso excesivamente largo se puede traducir en un esguince.

Seguro que hay más razones, algunas incluso muy personales, pero las dejo para vosotros.

Bajar del nivel de los valores, visión,  misión, etc... hasta el nivel del problema concreto, el que nos quita el sueño, suele ser complicado. Pensar en valores en una situación en la que estamos con litros de adrenalina circulando por las venas, no es un acto notable, ¡es un milagro!

Piko-Piko
Piano, piano. Vamos a empezar con la parte práctica desde abajo, muy abajo.

Os propongo una técnica respiratoria de los chamanes hawaianos, descrita en el libro de Helmut Krusche "Libre como el águila", relajémonos profundamente utilizando la respiración piko-piko.

Respire unas cuantas veces con tranquilidad, muy normal, tal como lo hace siempre. Después, al inspirar diríjase con su imaginación consciente al vértice de su cabeza, la unión simbólica a su más alto yo. Al espirar dirija su atención al ombligo. Eso es todo, o sea, inspirar y concentrarse en el vértice de la cabeza, espirar y situarse con la imaginación en el centro del estómago...

Desde el cielo a la tierra, miramos al cielo conectados a la tierra. Ascendemos con la inspiración y descendemos con la espiración. Unimos simbólicamente lo más alto con lo más bajo, nuestros valores y nuestra situación actual. Ya hemos creado el vínculo vertical.

Respirad .... Respirad de forma consciente

Ya estamos en marcha, ya hemos dado el primer paso, ¿fácil verdad?

sábado, 15 de septiembre de 2012

Cómo mejorar la autoestima

Al concepto de la autoestima, que a primera vista parece fácil de definir, le pasa lo mismo que a los valores, no se ven, no se pueden pesar en una báscula, ni medir con un metro. Por lo tanto dan pie a muchas interpretaciones, algunas de las cuales voy a referir en esta entrada. Al final mi receta magistral.

Si buscáis en la red encontraréis una gran cantidad de contenidos, desde su definición (múltiples definiciones) hasta técnicas y consejos para mejorarla. Como curiosidad aquí tenéis un test para evaluar el nivel de autoestima.

De todas las definiciones, empezaré por la más sencilla, la de la wikipedia: Percepción evaluativa de uno mismo. Como no sé si está muy claro, apunto también esta de Raquel Resines que dice: sentimiento de aceptación y aprecio hacia uno mismo, que va unido al sentimiento de competencia y valía personal. Sigo leyendo en la wikipedia y me encuentro que según Nathaniel Branden la autoestima permite a las personas enfrentarse a la vida con mayor confianza, benevolencia y optimismo, y por consiguiente alcanzar más fácilmente sus objetivos y autorrealizarse. Podría entonces pensarse que es una herramienta para conseguir objetivos, pero no, este mismo autor nos dice que se puede entender como un logro espiritual y mental. Que a su vez se manifiesta en un estado en que la persona no está en guerra con los demás ni consigo mismo.

Percepción evaluativa, sentimiento, herramienta, logro, estado, ...., ¿quien da más?

Pues aún más. Si para mejorarla, emparejamos la autoestima con un "sano estado de egoísmo", como nos propone Branden, el cóctel puede ser explosivo. Porque el egoísmo tiene un montón de connotaciones negativas. ¿Qué podemos hacer?¿Cómo manejar este sarao?

Mi receta en este punto, olvidarnos de ella como meta y tratarla como una consecuencia.

Autoestima autoprogresiva
Para Fredy Kofman hay tres niveles en los que se puede fundar la autoestima: 

En el primer nivel, la autoestima está basada en los logros que uno ha obtenido, las cosas que ha conseguido. Ya sea un objeto valioso, o el reconocimiento personal, o incluso el atractivo de su cónyuge. Este nivel, en el que nos encontramos la mayoría de la gente, se ve condicionado por factores externos fuera de control, imprevisibles, que hacen que sea muy fácil la pérdida del objeto conseguido o del logro alcanzado. Además para preservar la autoestima a este nivel, hay que repetir constantemente el triunfo. (Sísifo y la roca)

En el segundo nivel, la autoestima está basada en el comportamiento, en un modo de hacer, digamos virtuoso, donde se opera según principios y valores, con la intención. Esta forma de actuar nos libra de perder la autoestima cuando el resultado ha sido diferente al esperado. Esta basada en factores internos, no condicionados por el exterior. Pero hay pocos "Budas" por el mundo, que realicen tan solo actos virtuosos. Todos tenemos una parte de sombra, motivaciones internas, ocultas, que operan en el subconsciente y pueden llegar a boicotear nuestras mejores intenciones y hacer que la autoestima zozobre. 

Y finalmente el tercer nivel, el del alma, el del espíritu, donde no hay nada que conseguir, ni nada que demostrar, donde todo es por igual. El de la iluminación, ¡vamos!

Si pudiéramos elegir empezaríamos por el tercer nivel directamente, pero no nos fustiguemos por no estar todavía iluminados, ¡ya habrá tiempo!, mientras tanto podemos vivir la vida desde donde estamos. Empecemos por el principio, pongámonos objetivos, eso sí bien definidos, y disfrutemos de su consecución. De esta forma aprenderemos el proceso y el día menos pensado ¡toma ya! levitando por la habitación.

martes, 11 de septiembre de 2012

Las cooperativas de Mondragón

En esta entrada puede haber un sesgo, no lo discuto, porque el subconsciente me puede condicionar. Nací en el valle brumoso (alto Deba), donde está ubicada Mondragón, y estudié en la entonces Eskola Politeknikoa, fundada por Arizmendiarrieta. Durante los estudios trabaje en ALECOOP, (cooperativa de estudiantes), pero una vez graduado, toda mi vida profesional la he desarrollado en sociedades anónimas. Con lo cual, mi vivencia del cooperativismo es más que relativa. Yo personalmente considero que es casi nula. Dicho esto, ¡vamos al grano!

El movimiento cooperativo ha demostrado durante la crisis cuales son sus prioridades, grosso modo, se han bajado salarios pero se han mantenido los puestos de trabajo. En mayor o menor grado, esto es inteligencia espiritual y economía del bien común.

Después de esta declaración, arranco con José Mª Arizmendiarrieta y los principios creadores del movimiento cooperativo en Mondragón. He buscado la información en el libro de Inazio Irizar & Greg MacLeod "32 claves empresariales de Mondragón" del cual voy a extraer todos los contenidos.

Una de las cuatro razones que se atribuyen al éxito inicial es que los fundadores fue que: Se impusieron un exigente código moral .... La preocupación prevalente del cooperativismo arizmendiano era promover la comunidad del ciudadano y de la gente dentro de la comunidad. Al cooperativismo no le interesaban individuos ricos, sino una sociedad rica e la que todos los individuos pudiesesn tener una vida razonable, una vida promocionada, que pudiesen tener una perspectiva serena y equilibrada de la vida.

Sobre José Mª Arizmendiarrieta se hablan maravillas: trabajador entusiasta, austeridad espartana, visión social, motivador, gran sentido de la justicia, visión de futuro, sentido de la responsabilidad moral, líder con capacidad de transformar, .... Una frase suya que me ha gustado es: "El trabajo no es un castigo de Dios, sino una prueba de confianza dada por Dios al hombre, haciéndolo colaborador suyo" (en la transformación de la naturaleza) ¡casi nada! (ver la entrada ¡vaya antecedentes!)

José Mª Arizmendiarrieta
Las claves de su pensamiento son: Personas (factor determinante del éxito), Unión (proyecto común y compartido), Trabajo (contribución a la naturaleza, huella del hombre en el universo), Formación (único valor que no se desvaloriza) y Autonomía (cada uno dueño de su destino, propietario y protagonista de su vida). Nadie puede ser solidario, ni puede ser plenamente libre, si depende de otros.

No me voy a extender más porque para eso ya tenéis el libro de Inazio.

En estos momentos en el que el sistema capitalista neoliberal ha demostrado su fracaso (a nivel social me refiero), se imponen modelos alternativos con una escala de valores diferente, y a mi entender el movimiento cooperativista de Mondragón nos aporta alguna diferencia.

Aunque, como es bien sabido, en todos los sitios cuecen habas. Por lo que he podido hablar con algunos socios cooperativistas, existe un descontento con la "nueva cultura de gestión", que imita a las empresas capitalistas new age. Me cuentan, que aunque se mantienen los órganos de gestión: asamblea de socios, etc... únicamente se participa en la aprobación y no en la toma de decisiones. Todo se ha tecnificado, se ha puesto en manos de especialistas. Al igual que ocurre con la economía, donde ya no deciden las políticas con un fin determinado, sino los índices de riesgo y los indicadores macroeconómicos.

Las cooperativas, no son ni el único modelo ni el más innovador, existen otros sobre los que pretendo ir hablando en futuras entradas, pero hay que reconocerles muchas de las cualidades que definen a la economía del bien común y la inteligencia espiritual.

domingo, 9 de septiembre de 2012

En la empresa lo importante son las personas

¿Os suena la frase del título? ¿nada original verdad? Pues aunque parezca cachondeo, por lo tópico del tema me refiero, al final de la entrada hablaré un poco de ello.

Hoy quería reflexionar sobre algo que he leído en el libro de Kofman. En concreto el capítulo titulado IDENTIDAD y AUTOESTIMA, en el que habla entre otras cosas, de los problemas dentro de las organizaciones, del narcisismo, etc...

Citando a Peter Senge, se indica que la principal causa de ineficiencia en las organizaciones es el modelo mental que sostiene "yo soy mi posición", y con posición se refiere a los puntos de vista que defiendo o al rol que desempeño. Esa posición soy yo, y mi autoestima está en juego, por ello la defenderé a capa y espada al margen de otras consideraciones o intereses.
Yo soy ...
Otro problema habitual como el narcisismo, es también debido a una autoestima baja, que se manifiesta de dos formas: bien restando mérito a los demás (machacando a todo ser vivo a nuestro alrededor) o sobrevalorando el mérito de uno mismo (no si yo ya ... ). Al contrario de lo que se podría pensar, el narcisismo no está basado en un amor propio alto, sino que se basa en el temor de no ser valioso, estimable o digno de amor.

Robert J. Marshak en su libro "Cambio organizacional", cuando habla de las razones ocultas que boicotean el cambio en las organizaciones, entre otras cita a: las creencias y supuestos implícitos, las defensas y reacciones inconscientes y las emociones asociadas al cambio. Quiero remarcar estas tres en particular, aunque en realidad en el libro se hable de seis razones, porque se refieren a causas personales, de individuos me refiero, y no de la organización. Dicho de otra forma: el cambio en las organizaciones está condicionado por parámetros no-racionales de los individuos que las componen.


Ahora os propongo el ejercicio de adivinar qué alternativa elegirá una persona que por un lado se enfrenta con una cuestión de autoestima y por otro lado con una cuestión de valores/visión. Por ejemplo, ¿qué elegirá una persona que asocia su autoestima al puesto de jefe que ostenta, en caso de verse en la disyuntiva de optar entre: lo que le mantiene en su estatus de jefe o lo que acerca a la empresa a la visión compartida?

Ya sé que el ejemplo es muy simplón, pero estoy seguro que a todos nos ha venido alguien a la cabeza (confío en que pocos de nosotros hayamos ido a parar a la cabeza de algún compañero).

Entonces, ¿de que estoy hablando aquí en este blog? ¿realización a través del trabajo basada en valores, visión y paraqués de alto nivel?¡si todavía tenemos la autoestima por los suelos! O nosotros, o nuestros jefes o nuestros compañeros, ¡así no hay quien pueda!

Hombre, poder poder, se puede, solo que es un poquito más complicado, requiere más atención.

Como conclusión diré que en las organizaciones, los equipos, la sociedad, necesitamos personas "creciditas" verticalmente, inteligentes espiritualmente. En la próxima oferta de trabajo, que nadie se olvide de incluir dentro de los requisitos del candidato: "con una alta autoestima y sentido del bien común".

Para dar luz en la oscuridad hay que estar iluminado (¡pedazo frase!)

En este blog, un poco más adelante, pienso explicaros mi receta (primeros pasos) hacia la iluminación.

martes, 4 de septiembre de 2012

Cómo ser un líder

En los cursos que se organizan en el entorno empresarial, es muy habitual encontrar contenidos relativos al liderazgo. En ellos, bajo un prisma analítico, se desmenuza todo lo que rodea al concepto de líder: características, cualidades, tipos, requisitos, etc...

Hemos incorporado el término líder a nuestro vocabulario y lo empezamos a usar en expresiones como "¿quién lidera este trabajo?", "Tu eres la persona que vas a liderar el proyecto", ...., parece que ser líder gusta al personal, mucho más que responsable, jefe o coordinador. En el diccionario de la RAE se define como la "persona a la que un grupo sigue, reconociéndola como jefe u orientadora". La diferencia subjetiva está, en que el grupo sigue al líder voluntariamente y al jefe, responsable o coordinador, se les puede seguir o no, voluntariamente o por obligación. ¡Vamos, que ser líder mola más!

La palabra deriva del término inglés leader, y con ella nos hemos traído alguno de los valores más característicos de la cultura anglo-sajona, como son el individualismo. Quizás por eso, ser líder parece considerarse una meta en si misma, una forma de crecimiento vertical, como correr la Behobia-San Sebastián cada año en menos tiempo. Me motivo, establezco un objetivo marte, ensayo delante del espejo, leo libros, voy a un curso y ¡tachán! ya soy un líder cinturón negro. ¡así de sencillo!

¿así de sencillo?

Veamos que nos dicen los manuales de liderazgo al respecto ... -> sigue la flecha.
  • Como los líderes tienen capacidad de comunicación -> hay que tener capacidad de comunicación.
  • Como tienen capacidad de movilización -> hay que tener capacidad de movilización.
  • Como generan confianza -> hay que generar confianza.
  • Y así hasta la asíntota .... y así nos luce el pelo.
Lluvia de ideas
En un seminario al que asistí que hablaba sobre liderazgo, dijeron una cosa muy interesante "sin proyecto no hay líder" o "un líder acaba cuando acaba el proyecto" y sobre esta idea quería reflexionar.

Porque según esto, lo primero es el proyecto y el líder es la consecuencia. Es decir, no hay que pretender ser un líder, sino generar un proyecto que por sí solo dará lugar a un líder.

Entonces, PROYECTO -> LÍDER

Y ahora vamos al meollo ¿cómo generar proyectos?

Esto es lo que yo pienso sobre la cuestión: los proyectos surgen de un objetivo superior, nuestro PARA QUÉ, ideal/valor/VISIÓN superior, los proyectos son un paso intermedio para conseguir algo más elevado. Por muy pequeño que sea el logro que el proyecto pretende, nos debe acercar hacia nuestro VALOR/VISIÓN. Nuestro trabajo va de abajo hacia arriba pero las ideas vienen de arriba hacia abajo.

En consecuencia VALOR/VISIÓN -> PROYECTO -> LÍDER

Si la visión es compartida, el proyecto tiene más posibilidades de serlo. En esta entrada hablé de los CRITERIOS, que nos sirven para validar los valores/visión. Dediquemos pues nuestras energías a que los CRITERIOS sean COMPARTIDOS.

Esto es pura realización personal a través del trabajo.