Os hago una rápida traducción de los encabezados de estas megatendencias:
- Cambio demográfico
- El individualismo alcanza un nuevo estado
- Desigualdades sociales y culturales
- Reorganización de los sistemas de salud
- Cambios en los roles de género
- Nuevos patrones de movilidad
- Cultura digital
- Aprender de la naturaleza
- Inteligencia ubicua
- Convergencia de tecnologías
- Globalización 2,0
- Economía basada en el conocimiento
- Ecosistemas de empresas/negocios
- Cambios en el mundo laboral
- Nuevos patrones de consumo
- Transformaciones en la energía y los recursos
- Cambio climático e impactos ambientales
- Urbanización
- Nuevo orden político mundial
- Sociedad del riesgo global
Aún sabiendo que son solo prospecciones, me sube un escalofrío por la columna cuando leo algunas de ellas. Os cuento por qué.
No veo que la crisis financiera que estamos sufriendo deje alguna lección aprendida. Es más, veo que se habla de la privatización de los costos de salud, que es una de las consecuencias de las crisis, y de un sector financiero sin restricciones, que es la causa de la crisis. Si este estudio no se equivoca, "el malo" que nos llevó a la crisis va a seguir suelto campando a sus anchas.
no ver, no oir, no hablar |
Una de las cosas que ha quedado patente en la situación que estamos viviendo, es quién ostenta el poder en el mundo mundial globalizado. Si pensábamos que era cosa de los estados, pues no, resulta que hemos descubierto que no pintan demasiado, que son solo títeres en manos del poder económico.
Sin rostro, sin ubicación, sin líder visible, es como el "Anonymous" de las finanzas. Un ideal, un sistema de valores, compartido por algunas personas. Que además, como ocurre con los vampiros, acaba convirtiendo a todo aquel que muerde. "El mercado", "los inversores", ...., ¡uy que miedo! están a mi alrededor y yo sin saber quienes son.
Voy a tener que caminar por la vida con un collar de ajos y un crucifijo, o lo que sería equivalente en el mundo real; protegido por otro ideal más poderoso. Yo ya he elegido el mío, ¿has elegido el tuyo?