En esta entrada (y alguna más) voy a mostrar aspectos de otras culturas relacionados con el tema de este blog:
realización a través del trabajo, individuo-sociedad. Anteriormente hablé un poco de la India, hoy le toca a Japón.
La cultura japonesa tiene un gran atractivo para mí, es como si fuera
el extremo del extremo oriente, no hay nada más allá de Japón. Incluso compartiendo una base cultural común con los países del entorno, tiene rasgos particulares que la diferencian.
A pesar de que nos puedan parecer raros, un poco marcianos, Japón ha ejercido una cierta
influencia sobre occidente. Consumimos bastantes de sus productos culturales: el manga, los videojuegos, la gastronomía, el zen, la organización de algunas industrias, etc... Es precisamente lo relativo a la organización industrial: el método TOYOTA, el kaizen, las 5 eses, etc... en concreto su aparición, a lo que quiero referirme.
La razón que hizo que se desarrollasen los métodos de
mejora continua y de calidad total en Japón fue el
compromiso social que las empresas tenían con los trabajadores. Cuando llegaron las vacas flacas, en lugar de despedir a la gente y organizar un ERE, se pusieron a pensar todos juntos, con independencia de su grado jerárquico, en cómo mejorar los procesos y ser más competitivos. Los resultados son de todos bien conocidos.
Ante una misma situación, occidente actúa de una forma y Japón actúa de otra. La diferencia son los valores,
el concepto de individuo frente al concepto grupo. Y sobre esto es de lo que quiero hablar hoy, UCHI-SOTO.
Uchi-soto en el idioma japonés es la distinción entre gente de "dentro" (Uchi, 内) y gente de "fuera" (Soto, 外). Esta distinción se aplica a grupos de personas. La distinción no sólo es una parte fundamental de la costumbre social japonesa, sino que también se refleja directamente en la lengua japonesa. El concepto básico gira en torno a dividir a la gente en grupos de dentro y en grupos de fuera. Cuando se habla con alguien de un grupo de fuera, se le debe
honrar y cuando se habla con alguien de dentro, se debe
mostrar agradecimiento. La relación de uchi-soto puede llevar a alguien a hacer grandes sacrificios personales para honrar a un visitante u otra persona de un grupo de fuera.
Una de las complejidades de la relación uchi-soto radica en el hecho de que los grupos no son estáticos, sino que se pueden superponer y cambiar con el tiempo y según la situación. En un ámbito determinado un grupo de personas puede de dentro y en otro ámbito ser de fuera, por ejemplo, un departamento de tu misma empresa puede ser de fuera cuando estás dentro de la empresa y ser de dentro cuando estás reunidos con gente de otras empresas. Esto va a condicionar el trato y la forma de dirigirse a las personas.
Una consecuencia de esta forma de pensar es que las opiniones individuales están supeditadas a las opiniones del grupo.
La armonía dentro del grupo es un bien que se debe preservar utilizando todos los medios posibles. Se busca el consenso aún a costa de ralentizar la toma de decisiones. Y lo que es más importante en estos tiempos,
no despides a alguien de tu familia.
Pero, no nos engañemos, también hay despidos en Japón, basta preguntar a Google por "despidos en Japón" y nos salen unos cuantos miles de japoneses en la calle. Ni son todos los que están, ni están todos los que son, no hay fórmulas generales sino más bien tendencias. Una cosa son los
valores, en los que todos podemos coincidir, y otra muy diferente los
criterios, sobre los que puede haber opiniones diferentes. No todos en Japón preservan la armonía dentro del UCHI.
Para mí de este ejemplo hay varias cosas buenas que aprender: primero que cuando el globo iba perdiendo altura
en lugar de "tirar lastre" decidieron quemar más combustible y segundo, todo lo bueno que puede surgir cuando
en lugar de pensar unos pocos piensan unos cuantos más.
(He tomado gran parte de la información de esta entrada de las páginas de KIRAINET y de la wikipedia, el gráfico lo he cogido de aquí, si queréis saber más, daros una vuelta por ellas, la primera es muy divertida.)