En este caso a raíz del libro que me recomendó Lis titulado "Fluir" de Mihaly Csikszentmihalyi, que como su segundo título indica "una psicología de la felicidad", habla de eso, de la felicidad=fluir.
El libro profundiza en lo que denomina "la experiencia óptima", esa sensación de fluir que según nos cuenta, experimentamos las personas en los momentos de felicidad y disfrute. Y no confundir disfrute con placer.
Se basa en las experiencias de decenas de miles de personas, que fueron muestreadas, interrumpidas de forma aleatoria, varias veces a lo largo del día durante un par de semanas, para que escribieran cómo se sentían en cada preciso momento. El estudio, se centra en las cosas que ocurren y cómo las experimentamos e interpretamos, sin preguntarse en las razones o propósitos inconscientes.
Se basa en las experiencias de decenas de miles de personas, que fueron muestreadas, interrumpidas de forma aleatoria, varias veces a lo largo del día durante un par de semanas, para que escribieran cómo se sentían en cada preciso momento. El estudio, se centra en las cosas que ocurren y cómo las experimentamos e interpretamos, sin preguntarse en las razones o propósitos inconscientes.
Las "características comunes de la experiencia óptima" los "elementos del disfrute" son:
- Una actividad desafiante que requiere habilidades
- Combinar acción y conciencia
- Metas claras y retroalimentación (feedback)
- Concentración sobre la tarea actual
- La paradoja del control (sensación de control)
- La pérdida de la auto-conciencia
- La transformación del tiempo
Este fluir es de proceso mas que de metas. Aunque es necesario plantearse metas claras, el disfrute ocurre en el proceso, en la actividad, no en la cima sino durante la ruta ascendente. Como cuando hablamos de la autoestima, más en el comportamiento que en los logros.
Del flujo en tiempo de trabajo hablaré en otra entrada, hoy quería significar el concepto de la felicidad-fluir que nos muestra el autor, algo asequible al alcance de todas las personas, que cualquiera puede identificar y experimentar en su vida de forma repetitiva y consciente. Está ahí, presente en nuestro día a día, en nuestro quehacer, y en el peor de los casos, esperando solo a que cambiemos nuestra actitud.
Así de sencillo.
No nos debe extrañar, como explicaba en mis anteriores entradas, que cuando se nos pregunta en las encuestas, las personas nos reconozcamos felices . Pues todos experimentamos ese flujo, ya sea subiendo montañas, operando en quirófanos, leyendo libros o conversando con la gente, que todo cuenta.
Si tuviera que hacer una crítica al libro diría que para mi gusto, se queda en "lo vertical", en el crecimiento personal, uno mismo con sus retos y su circunstancia. Aunque se intuye la trascendencia, y habla todo un capítulo del significado, de cómo los construímos, etc... lo social aparece de forma muy indirecta, y cómo podéis ver, nada de lo anterior forma parte de las características de la experiencia óptima.
Quizás no podría ser de otra manera para que el estudio fuese "serio".